Pineral

«Un Pineral pide el cantor, Fernet piden los demás.¡Un Pineral pide el cantor, Fernet piden los demás!»

Así reza el estribillo de la canción El cantor, del grupo Pez. Un Pineral, aperitivo con aire tanguero y gustito a múltiples hierbas. Un vermut que reinaba en la Argentina de los años 40 y 50 y que aún se consigue en los supermercados amigos.

Herbáceo, intenso, oscuro, complejo. Si de simpleza se trata, Pineral no es un aperitivo fácil. No es un tipo entrador, pero tiene mucho de sabio. Hay que saberlo conversar y nos dará su punto de vista. A veces rebuscado,pero si lo dejamos expresar puede brindar un magnífico momento.

Elaborado sobre la base de varias hierbas y vinos, es un aperitivo alcoholico, del tipo de los secos, conocidos con el nombre de Amaros. Existen los vermuts dulces y secos. Esas categorías se subdividen entre los americanos e italianos que son dulces, del tipo del Gancia o el Martini, y del tipo francés y Amaros, los secos. Los Amaros se subdividen a su vez en bitter (Campari o Luxardo) y quinados (Fernet, Cynar, Dubonnet o Pineral).

Nació sobre la depresión del 30 y producto del éxito que tenia el Fernet Italiano en Argentina. Pero con receta propia y nacional, macerando infusiones alcohólicas con hierbas aromáticas y cáscaras de cítricos, en una fórmula secreta de los hermanos Pinni.Conocido como «el fernet de los pobres» adquirió un éxito relativo en la década del 70, antes de sumirse en el recuerdo. De una producción anual de 600 mil botellas, cayó a la actual producción de 40 mil. Actualmente es un producto que comerciliza Licores Argentinos S.A. junto a la emblemática Hierroquina. Ambas elaboradas en la planta productora que la empresa tiene en Lomas de Zamora. Los asiduos bebedores de este magnífico elixir, dicen que tiene un sabor cercano al Jägermiester. Pero nada que envidiarle al licor de los maestros cazadores alemanes, el favorito de Steven Taylor. Es sabroso, no tan anisado como el germano y hasta tiene su propio tango homónimo, de la mano de Ángel Villoldo el creador del conocido tango El Choclo. Se lo puede beber con jugo de pomelo o preparado la receta del Tres por Cuatro, pero desde El Club del Vermut recomendamos acompañarlo de bebidas energizantes, que bautizamos como Hormiga Negra.

En los tiempos de los barmans de antes, como el histórico Manolete, el Pineral era un comodín para la hora del aperitivo, que con los años pasó de moda, superado por bebidas más glamorosas como el Campari. Para los neófitos en materia de vermuts, es bueno saber que el Pineral es similar al Dubonnet, su par francés. Claro que el líquido galo viene en dos versiones: la blanca y la roja. Generalmente estas bebidas tienen un gusto y aroma tan particulares que resulta complicado combinarlos en cócteles demasiado elaborados.

Una leyenda cuenta que el Pineral es uno de los pocos vermuts en el mundo que aún conservan en su fórmula de elaboración una pequeña cantidad de ajenjo, aquella hierba con propiedades alucinatorias que bebían los artistas a comienzos del siglo XX. Si la historia es verdadera, habrá que comprobarlo tomando hoy un traguito de esta bebida de otros tiempos.